Abandonamos éste en la bifurcación para ir al Pico Arriel ( que no a los Lagos de Arriel) y al Barranco de la Soba, aproximadamente a 1.650 m. Aquí el camino ya no es tan cómodo y los esquís empiezan a pesar. ¡Se enganchan una y otra vez en los arboles!. ¡Cúando podremos calzárnoslos!
Pues casi en el pequeño llano, a 1850m.
Las palas nevadas, de orientación Este, han recibido el sol desde el amanecer. Había que haber madrugado más.
Un grupo numeroso de vascos, los únicos esquiadores con los que nos juntaremos en todo el día, ya bajan disfrutando cuando a nosotros todavía nos queda una tirada. La subida no es del todo cómoda a causa del estado de la nieve, a pesar de cortar la pendiente nos resbalamos una y otra vez.
Atravesamos los restos de una avalancha a la que aun le queda por caer.
Alcanzamos la arista, con magníficas vistas del Palas, Arriel y Balaitús.
Bueno, y aquí el TRACK DIENTE DE SOQUES para no perderse
muy bonitas
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