Cambiamos el Pico Gradillère (2.271m) con el que venimos como objetivo por el Pic d´Anéou o Punta dera Nieu (2.364m). No nos gusta cómo está el itinerario.
Prácticamente para ir a cualquier lado hay que abrir huella.
Tras dar un paseo por nuestro jardín, con la vista en el gran pitón rocoso de paredes verticales del Pène de la Glère, enfilamos por fin hacia el Pic d´Anéou.
En esta ocasión ascendemos mucho más pegados a las enormes rocas del pico Mahourat (2.310m) a nuestra izquierda. No suele ser recomendado tras grandes nevadas. Es una ascenso sombrío.
Del collado ya no queda nada. Bueno sí, ¡la estupenda bajada que tiene esta cima!¡Yupiiiiii!
Salimos sin tener claro el objetivo el día, que va a terminar siendo el Pico Arroyeras (2.567m).
Desde las pista de Anayet, la subida normal hacia la Mallata o Llanos de Anayet suele realizarse por el barranco de Culivillas (GR-11), pero al ser un barranco avalanchoso hay una alternativa. Hoy por cambiar y calibrando que no es comprometido tiraremos por aquí.
Si hay riesgo de aludes es mejor subir por la derecha, por la Glera de Anayet. No siempre está claro, ya que hay una travesía algo expuesta según condiciones.
Iniciamos por la misma ruta del Pico Anayet, por el barranco de Culivillas. Antes del último zigzag que nos deja en la explanada de los ibones giraremos a nuestra izquierda hacia el collado. Las vistas hacia la Partacua y la pala de Ip son impresionantes. A la derecha la cresta que va al Vértice de Anayet.
Desde el collado, ya sólo nos queda la ladera pendiente para alcanzar el cordal cimero. La cima tiene muy buenas vistas.
Buscamos el mejor descenso y acabaremos volviendo por el barranco de Culivillas, descenso más directo y rápido. Hay que tirarse a la ladera derecha sin perder altura, que si no luego hay que remar. Así conectamos bastante alto con las pistas de la estación. Todo depende de las condiciones: a veces tiene poca nieve, o helada, avalanchosa... y merece la pena flanquear subiendo un poco para regresar por la Glera de Anayet.
El pequeño aparcamiento cercano al anti-aludes de arriba estaba vacío y ... mínimo. Hay bastante nieve y menudos hielacos. Salimos cruzando la carretera y superando el talud hacia el bosque de hayas entre los dos anti-aludes, en la cota 1.472m. Desde el inicio calzamos tablas y, por supuesto, cuchillas. Estos bosques encantados parece que no transforman nunca. El ascenso no es precisamente "encantador"..., es bastante tieso. Pero ni tan mal, a ver cómo está en el regreso.
Una vez en terreno despejado, vamos superando las palas de las laderas norte. Poco a poco, a la sombra, con las vistas extraordinarias de la muralla escarchada que cierra el circo y el Midi d´Ossau de guardaespaldas. Menudo ambiente. No se puede prescindir de las cuchillas. La ascensión es muy directa, pendiente y dura, pero sin problemas. Hacemos cima en el Ourade (2.554m), "cima de invierno", "La Coroneta" o cima más occidental (2.527m), contentísimos. La verdadera es de armas tomar, bloques, agujas vertiginosas, crestas..., una cumbre muy abrupta.
Es una ascensión que nos encanta, con una panorámica espectacular. Tal como la recordábamos de nuestra ascensión del 2019. En aquella ocasión continuamos al Ferraturas. En esta ocasión va a ser que no.
Dejamos atrás Anéou impecable y en 4 km 10 minutos ya estamos
Salimos del Caillou de Soques a 1400m con las tablas calzadas para adentrarnos en el bosque. Abandonamos éste en procesión y cruzamos el puentecito que nos deja en el inicio del Valle de Arrious. Ascendemos por la derecha orográfica con el gran Midi detrás hasta la Cabane de Arrious, construída aprovechando una gran piedra, la Quèbe d'Arrious (1700m).
Las trazas continuan al Col d´Arrious (2.250m), el itinerario hacia el refugio de Arremoulit. Las seguiremos en lugar de desviarnos en un pequeño llano con una roca gigante como señal como hicimos en otra ocasión. Sería la entrada a una canal corta pero bastante empinada con dirección al Col de Soba (2.450m, es la Ruta 70 del libro de Jorge). Vamos un grupo numeroso y preferimos una ruta más sencilla.
Llegamos al lago de Arrious (2.280m), pero el Petit Arriel no va a poder ser. El "petit" se nos ha hecho grande... Se ha hecho muy tarde. Todavía continuamos casi hasta el collado. Cuanto más subamos, más nos deslizaremos.
El descenso ha estado muy bien. Merece la pena mantenerse en la vertiente izquierda del ruisseau d´Arrious ya que el lado sur aunque no presenta falta de nieve su calidad no es lo mismo.
Trés belle journée de ski rando!
¡Eskerrik asko Club de Montaña Goiena de Gasteiz por organizar estas salidas! Merci beaucoup!¡Hemos disfrutado un montón!
Nunca hemos subido al pico Musales (2.658m) con esquís y siempre hemos mirado con admiración esa pala que se ve desde la carretera mientras sufrimos las retenciones de tráfico. La tenemos pendiente, hoy subiremos por su cara sur desde el Embalse de la Sarra y a ver si tenemos suerte y está esa "palaza" en buenas condiciones, su orientación oeste en principio es buena.
Hay muchos esquiadores y problemas para aparcar en el inicio de la ruta. Retrocedemos y dejamos el coche antes del embalse pasando el puente de la presa a pie. Iniciamos la pista de Ibonciecho con las tablas calzadas, estamos a 1.430m y ya no nos las vamos prácticamente a quitar en casi toda la ruta. Porteo cero.
Dejamos el desvío que baja a Sallent y después, exceptuando el primer atajo que no merece la pena, abandonamos la pista en cada uno de los mojones que nos indican el sendero que nos permitirá ganar desnivel más rápido por el bosque. Así evitamos los interminables zigzags, que se hace largo.
Luego de nuevo la pista nos lleva hacia la izquierda al Barranco deSanchacollons, caseta del ingeniero y el panel blanco, el repetidor. A la derecha vemos el Puiarcol y detrás todo el tiempo magnífica la Peña Forata. Abandonamos ésta cuando empieza a descender para dirigirnos a Ibonciecho por una loma en la que por breves momentos debemos descalzar las tablas.
Rodeamos largo Ibonciecho por la izquierda y comenzamos las zetas del ascenso. En algún momento empina más, pero sólo casi al final, llegando al collado, resbala un poco haciendo la progresión más lenta e incómoda.
En el Collado de Musales oriental o Forqueta de Ibonciecho dejamos los esquís. La panorámica sobre Respomuso es fantástica: el ibón y su refugio. La Facha, Frondellas...¡Menudo diazo!
Desde el collado hacemos la fácil cresta sin crampones, pero para bajar nos los pondremos. En la cima comprobamos que nuestra pala está todavía dura y le falta nieve. Sopla el viento y no merece la pena esperar, la "palaza" en directo ha perdido un poco de encanto...
Realizamos el descenso disfrutón tirándonos más hacia el fondo del valle, más hacia la izquierda. La nieve está muy buena y apenas hay huellas. Sólo hemos coincidido con un grupo de esquiadores con los que hemos compartido cima solitaria.
Han sido 1.200 m de desnivel y 14km. La pala oeste no era para "este" día. Volveremos, hay que pillarla bien. Pero es el primer Musales con esquís. Estamos muy contentos.
